Este año el regreso a clases ha sido muy distinto para la comunidad del Liceo Técnico Profesional Mannheim en Quilpué, uno de los establecimientos en la llamada “Zona cero” del incendio que afectó a la Región de Valparaíso. Decenas de estudiantes, profesores y asistentes de la educación se encuentran dentro de las personas damnificadas. Por eso, y tal como muchas otras comunidades escolares, todo el equipo ha desplegado un trabajo especial para poder acoger, escuchar y apoyar a las personas que fueron afectadas.
“Muchos de nosotros retornamos a trabajar en cuanto se controlaron los incendios, febrero se constituyó como un mes de aprendizajes, de ensayo y error, de lograr recabar información de cada uno y una de los estudiantes, fue complejo ubicarlos, así como contener innumerables relatos, de las familias y de nuestros funcionarios”, cuenta Marcela Vergara, directora del establecimiento.
En un escenario desafiante, las claves para las comunidades escolares de las comunas afectadas han sido la contención, acompañamiento y flexibilidad. “Enfrentamos este inicio de año escuchando mucho, preguntando poco, hemos diversificando las actividades del aula, hemos jugado más. Han sido meses intensos, pero llenos de oportunidades para acercarnos más a nuestros estudiantes y a las familias. Meses llenos de empatía y de aprender a ser mejores en lo que sabemos hacer, enseñar”, añade la directora.
Kits para apoyar el retorno a clases
Con el objetivo de apoyar a los estudiantes y establecimientos en este retorno a clases, Fundación Luksic y Fundación MC concretaron durante marzo y abril la entrega de más de 1.000 kits escolares a estudiantes desde prekinder a cuarto medio en 33 colegios de la Región de Valparaíso, específicamente en las comunas de Viña del Mar, Valparaíso, Quilpué y Villa Alemana. “Estamos profundamente agradecidos y conmovidos. Esta acción representa la oportunidad de dar alegría y esperanza a cada una de nuestras familias”, destacó la directora.
Los alumnos recibieron sets personalizados para las distintas edades. En el caso de los alumnos de octavo a cuarto medio el apoyo consistió en un notebook, mouse, mousepad y una mochila. Los niños más pequeños recibieron una mochila, una botella de agua, juegos y lápices acorde a su edad. También, en todos los kits se incluyó una gift card de libre uso para las familias y material de apoyo socioemocional para enfrentar momentos de crisis.
“El fuego se apagó pero la emergencia continua y por eso desde Fundación Luksic hemos estado en terreno para coordinar diferentes aportes. Nuestro corazón y propósito están centrados en la formación y esperamos que los más de 1.000 kits sirvan para que los estudiantes, niños, niñas y jóvenes puedan continuar sus estudios a pesar de las adversidades”, expresó Isabella Luksic, gerente general de Fundación Luksic.
“Estos kits no solo proveen materiales que serán un soporte para el retorno escolar de los estudiantes, sino que también representan un mensaje de apoyo y solidaridad para las familias y comunidades afectadas, reafirmando nuestro compromiso con el bienestar y desarrollo integral de los niños, niñas y jóvenes de Chile”, destacó Alejandra Grebe, directora ejecutiva de Fundación MC.
Asimismo, también en el contexto de la emergencia, Fundación Luksic concretó otras acciones para apoyar a las comunidades afectadas por los incendios. Entre ellas, la donación de 310 uniformes de alta complejidad al Cuerpo de Bomberos de Viña del Mar; la habilitación de un Centro de Operaciones Acopio y Atención para familias damnificadas, y la entrega de herramientas y maquinarias a emprendedores afectados para que pudieran levantar nuevamente sus negocios.