Construir puentes. Ese es el significado de la palabra “Chaka”, la cual inspiró el nombre de un innovador programa de acompañamiento educativo que actualmente es implementado en cinco colegios y liceos de la Región de Arica y Parinacota. Se trata de un proyecto creado en 2019, a través del que Fundación Luksic en una alianza estratégica el Laboratorio de Investigación e Innovación en Educación para América Latina y el Caribe, Summa, buscan transformar y mejorar la calidad de los aprendizajes utilizando metodologías enfocadas en la colaboración.
Con talleres prácticos, modelos de planificación invertida, instancias de diálogo reflexivo respecto de las metodologías de enseñanza aplicadas, además de estrategias que promueven la interacción, metacognición y retroalimentación positiva entre estudiantes con objetivos comunes, Chaka ha implementado un modelo de acompañamiento en los establecimientos involucrados, durante todo el periodo de pandemia.
En ese entendido, el director del Laboratorio de Educación de Fundación Luksic, José Gutiérrez, publicó una columna de opinión en la revista de la organización titulada “El rol de las conexiones humanas”, en la que relevó la importancia del diálogo entre las comunidades educativas y cómo se han abordado el hecho de ejecutar un proyecto de estas características en medio de una pandemia, considerando los innumerables desafíos que esta ha significado para el sistema educativo. A continuación, destacamos la columna completa.
El año que apelamos a la humanidad
En los inicios de Chaka, cuando comenzamos a conversar como equipos de SUMMA y Fundación Luksic, teníamos una idea clara de cómo sería la implementación del proyecto y de los posibles riesgos que existían. En el año 2019 avanzamos a paso firme, generando alianzas con las cinco comunidades educativas en las que íbamos a implementar el proyecto y poniendo los cimientos para tener una base fuerte capaz de enfrentar cualquier contratiempo.
Y llegó el año 2020. El año pasado nos hizo enfrentarnos a un escenario completamente distinto al que cualquiera podría haber imaginado, mucho menos preparado. La incertidumbre nos golpeó a nivel emocional, físico, laboral, social, y nos motivó a trabajar más unidos para enfrentar juntos las dificultades. Frente a estos escenarios, como equipo de Summa y junto a los equipos de los colegios, identificamos dos grandes desafíos para las acciones que teníamos planificadas. Por una parte, el no saber qué iba a suceder y la dificultad de hacer planes en ese contexto. Por otra parte, la gran carga que veíamos en las comunidades escolares.
No fue un año como lo habíamos pensado cuando comenzamos a idear el proyecto, pero nos dejó aprendizajes y vínculos que quizás no habríamos podido construir de otra forma. Priorizamos el acompañarnos, conocernos y reservar tiempos especiales para la interacción, en un año donde necesitábamos más que nunca esa compañía.
En unos años más, creo que vamos a mirar 2020 y podremos estar orgullosos del trabajo realizado. Pero especialmente vamos a poder identificarlo como un año en que apelamos a nuestra humanidad, compromiso con los estudiantes y a las capacidades profesionales de cada uno para desde aquí construir un proyecto común más fuerte.
Agradecemos el compromiso de asistentes, docentes, directivos, sostenedores, profesionales de Chaka, consultores. Es en ustedes donde radica la fuerza de este programa.
José Gutiérrez
Director Laboratorio de Educación de Fundación Luksic
Puedes revisar la revista completa aquí: https://bit.ly/3gWbxyS