Los viajes con su padre al interior del Pueblo de Huara en el Norte Grande, encendieron la primera chispa del amor por la electricidad de Karla Moscoso. Recuerda cuando lo acompañaba a realizar pequeños trabajos eléctricos en la zona y cómo verlo, la inspiró a seguir un camino similar: “En la media estudié electricidad industrial, trabajé muchos años en la construcción y después decidí que quería estudiar algo relacionado pero que también sirviera para darle un buen futuro a mis hijos”, cuenta la joven de 25 años y madre de un pequeña de 8 meses.
Sus intereses por la naturaleza, sustentabilidad y preocupación por los efectos del cambio climático, llevaron a Karla a matricularse el año pasado en Técnico en Energías Renovables en INACAP. “Una de las principales motivaciones para estudiar esta carrera es mi amor por la electricidad y el cuidado del medio ambiente. Yo creo que puedo ser un agente de cambio, es importante que todos entendamos la importancia de utilizar energía renovable, ser eficientes, incluso desde qué productos electrodomésticos elegir”, explica la estudiante.
En su carrera ha aprendido teoría, pero también práctica. Ha tenido la oportunidad de manejar equipos de paneles solares en laboratorios, estudiar más sobre la energía eólica y realizar visitas a terreno en la región, como por ejemplo al Cerro Dominador donde se ubica la única planta termosolar que opera en medio del Desierto de Atacama.
Un apoyo para sus estudios
Karla cuenta desde que salió del liceo tuvo que trabajar para pagar sus estudios, pero este año a través del instituto se enteró de una nueva oportunidad: la Beca Luksic Más Mujeres en STEM de Fundación Luksic, cuya postulación se realizó en alianza con los centros de formación técnica e institutos profesionales: INACAP, Santo Tomás, Duoc UC y AIEP. La beca entregará $150.000 mensuales a 100 mujeres de todo Chile que estudien carreras técnicas relacionadas a las ciencias, tecnologías, ingenierías y matemáticas.
Postuló a través de su celular y hace unos días recibió la noticia de que es una de las 100 seleccionadas a nivel nacional y una de las tres ganadoras de la Región de Atacama: “Esta beca me va a aliviar demasiado la carga económica. Como no tengo gratuidad me parece muy genial esta ayuda y es un impulso para seguir adelante. A veces pensé en tirar la toalla, pero esto me reafirma que es por mí y para darle un buen futuro a mi hija”, dice con emoción Moscoso.
“Muchas mujeres enfrentan dificultades económicas para acceder y permanecer estudiando en la educación superior y la evidencia demuestra que las brechas de género son aún mayores en aquellas carreras que ofrecen una mejor empleabilidad y salarios, como lo son las ligadas al ámbito STEM. Por eso, queremos apoyar de manera concreta a las estudiantes que opten por este camino porque estamos convencidos de que, a través de la formación, las personas pueden mejorar sus trayectorias de vida y así también aportar al desarrollo de Chile”, explicó Isabella Luksic, gerente general de Fundación Luksic.
Becadas de Norte a Sur
Karla es una de las tres ganadoras de Tarapacá. Las regiones con mayor cantidad de ganadoras son en primer lugar la Metropolitana (25%), Valparaíso (14%), Biobío (9%) y Coquimbo (9%) y el rango de edad de las ganadoras es entre los 18 y 59 años, predominando las estudiantes de entre 20 y 22 años (26% del total). Del total, el 41% de las ganadoras de la beca son madres, el 67% declara ser la principal sostenedora del hogar y el 68% trabaja además de estudiar.
Karla cuenta que ama el emprendimiento y a futuro le encantaría tener su propia empresa. “Después de estudiar, trabajar y ganar experiencia, quiero tener mi propia pyme de energías renovables, ya sea de paneles solares o torres eólicas, ya que es lo que más me gusta de mi carrera”, cuenta la joven.