La charla también contó con la participación de Esperanza Cueto, presidenta de la Fundación Colunga y Patricia Matte, presidenta de la Sociedad de Instrucción Primaria (SIP red de colegios), fundadora y presidenta de la Fundación Olivo, quienes junto a Paola Luksic, compartieron sus aprendizajes y los roles que tomaron sus fundaciones para entregar apoyo en la emergencia que ha vivido Chile por la pandemia del coronavirus.
Magdalena Aninat, directora del Centro de Filantropía e Inversiones Sociales (CEFIS) de la Universidad Adolfo Ibáñez, fue la encargada de moderar el evento, que se realizó vía Zoom. Uno de los primeros temas fue sobre las consecuencias que tendrá esta crisis y cómo las tres panelistas planean, desde sus respectivas fundaciones, apoyar la recuperación.
Paola Luksic fue la primera en tomar la palabra y explicó que el propósito de la Fundación Luksic es “crear cambios sostenibles que aumenten las oportunidades y el bienestar de las personas y comunidades en las diferentes regiones de Chile, a través de apoyos en emprendimiento y formación”.
Respecto a la recuperación, Paola Luksic señaló que en Fundación Luksic están constantemente evaluando en qué áreas pueden colaborar, tanto ahora como después de la crisis sanitaria: “Estamos trabajando fuertemente para apoyar el emprendimiento. Desde Impulso Inicial, hemos ido aumentando la cantidad de casos que tomamos semana a semana. Por otro lado, estamos programando la tercera edición de Impulso Chileno, concurso que entrega financiamiento y apoyo académico para que los emprendedores saquen adelante sus emprendimientos con la compañía de profesionales”.
En el segundo bloque, Magdalena Aninat destacó la solidaridad que se ha visto tanto en Chile como en varios países del mundo durante esta crisis y preguntó a las panelistas cuáles han sido sus aprendizajes en estos últimos meses.
Las tres coincidieron en su diagnóstico, concordando en lo importante que era la colaboración entre fundaciones y organizaciones de la sociedad civil para poder funcionar como una gran comunidad, acudiendo así de manera ágil con apoyos a quienes más lo necesiten.
Patricia Matte señaló que era fundamental la transparencia y tener la confianza de la ciudadanía. Esperanza Cueto, por su parte, enfatizó en que era necesario “mover la aguja” para generar cambios que tengan incidencia en políticas públicas. Por último, la presidenta de la Fundación Luksic destacó la importante tarea que tienen las fundaciones en su profesionalización y eficiencia. “En tiempos de pandemia, aprendimos que hay que responder más rápido a más solicitudes, que si estamos todos dispuestos a trabajar por una causa, y no solo una causa de crisis, se pueden alinear distintas fundaciones para un objetivo específico. Quedó en evidencia que podemos unirnos y que la colaboración si funciona y llegó para quedarse”.